La década de 1930 a 1950 es conocida como el apogeo de los trajes vaqueros. La migración masiva hacia el oeste y el descubrimiento de tierras agrícolas y ganaderas ricas en California se completaron en su mayoría en la década de 1930. Hollywood se estableció evitando el ajetreo y el bullicio de la vida de la gran ciudad, prefirió el tranquilo desierto del sur de California rodeado de colinas y granjas de ganado.
A pesar de que los actores y actrices eran retratados en la televisión viviendo lujosas vidas en la Gran Manzana, a menudo encontraban la paz en un rancho de California. No importaba si criaban caballos o ganado, vivían en casas y vestían de manera informal como los granjeros de la clase trabajadora.
Era solo cuestión de tiempo antes de que la vida hogareña se convirtiera en vida de la pantalla. Las películas y los programas de televisión "vaqueros" en blanco y negro capturaron la vida "en el salvaje oeste" persiguiendo a los forajidos a caballo. La fascinación con esta vida fue sentida por adultos y niños. Las personas veían The Lone Ranger siendo para todos los pequeños su gran sueño, crecer y capturar ladrones de bancos en trajes vaqueros, con botas y sombrero. La industria de la ropa se ocupó de esto con la reproducción occidental de ropa para niños mucho antes de que la tendencia despegara para los adultos.
Fuera de la televisión, el rodeo en vivo fue un gran interés a partir de finales de la década de 1920. Tanto los hombres como las mujeres eran estrellas del rodeo con sus monturas y sus chaparreras de lujo, camisas de flecos y sombreros brillantes con diamantes de imitación y hebillas en los cinturones.
Estos llamativos trajes vaqueros fueron la inspiración de los años 30 y 40 de occidente con poca distinción entre los estilos de hombre y mujer. Ambos usaban pantalones de mezclilla, camisas con botones, botas de vaquero y sombreros grandes. Los colores eran muy brillantes y llamativos. Varios tonos de cuero curtido goteaban en flecos, lentejuelas, bordados y cuentas.
Una vacación popular para las clases medias era para un rancho de amigos, donde los veraneantes vestían la parte. Algunos amaron tanto su ropa que continuaron usándola en casa.
Hoy, en pleno 2018 la moda sigue vigente tal como en aquella época. Los trajes vaqueros no distinguen entre género ni edad, sirven y son usados por personas de todas las clases y lugares del mundo extendiendo la moda vaquera de los 20.
A pesar de que los actores y actrices eran retratados en la televisión viviendo lujosas vidas en la Gran Manzana, a menudo encontraban la paz en un rancho de California. No importaba si criaban caballos o ganado, vivían en casas y vestían de manera informal como los granjeros de la clase trabajadora.
Era solo cuestión de tiempo antes de que la vida hogareña se convirtiera en vida de la pantalla. Las películas y los programas de televisión "vaqueros" en blanco y negro capturaron la vida "en el salvaje oeste" persiguiendo a los forajidos a caballo. La fascinación con esta vida fue sentida por adultos y niños. Las personas veían The Lone Ranger siendo para todos los pequeños su gran sueño, crecer y capturar ladrones de bancos en trajes vaqueros, con botas y sombrero. La industria de la ropa se ocupó de esto con la reproducción occidental de ropa para niños mucho antes de que la tendencia despegara para los adultos.
Fuera de la televisión, el rodeo en vivo fue un gran interés a partir de finales de la década de 1920. Tanto los hombres como las mujeres eran estrellas del rodeo con sus monturas y sus chaparreras de lujo, camisas de flecos y sombreros brillantes con diamantes de imitación y hebillas en los cinturones.
Estos llamativos trajes vaqueros fueron la inspiración de los años 30 y 40 de occidente con poca distinción entre los estilos de hombre y mujer. Ambos usaban pantalones de mezclilla, camisas con botones, botas de vaquero y sombreros grandes. Los colores eran muy brillantes y llamativos. Varios tonos de cuero curtido goteaban en flecos, lentejuelas, bordados y cuentas.
Una vacación popular para las clases medias era para un rancho de amigos, donde los veraneantes vestían la parte. Algunos amaron tanto su ropa que continuaron usándola en casa.
Hoy, en pleno 2018 la moda sigue vigente tal como en aquella época. Los trajes vaqueros no distinguen entre género ni edad, sirven y son usados por personas de todas las clases y lugares del mundo extendiendo la moda vaquera de los 20.
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